Todo un clásico del bricolaje... la transformación de una bobina de cable en mesa. Y uno de mis favoritos ¡no sé como hasta hoy no he pensado en ello!
Las bobinas de cable pueden convertirse en una mesa (mesilla de noche, mesa de centro, de comedor, de jardín,...) con una sencilla labor de reciclaje. Quizás la "tarea" más ardua de la "construcción", aquella que nos llevará más tiempo será conseguir una bobina. No son tan abundantes en las obras como los palets, de hecho yo recuerdo haber visto alguna en muy pocas ocasiones.
Una vez hayamos conseguido hacernos con una empezamos con una limpieza a fondo, un lijado, una pequeña "cirugía" si queremos sellar grietas y agujeros, imprimación y para acabar una mano de barniz o pintura.
Mis favoritas, casi "en bruto", sin añadidos ni "perifollos", todo muy natural.
Otra idea interesante de "Les dédées" forrarla con papel de periódicos y algún detallito en color. Creo que me hubiera gustado más el resultado con un colorido papel de cómic, vamos lo que viene a ser el tebeo de toda la vida. ;)
Unos "detallitos" para personalizar aun más nuestra mesa pero sin restarle ni un ápice del encanto original.
Esta, para mi gusto un tanto sencillo, me resulta pelín "barroca" y como veréis está muy currada, ¡aquí hay que invertir tiempo chicos!.
Y finalmente la mesa de comedor, en esté caso la parte del "sobre" no creo que la podáis hacer vosotros, tendréis que recurrir a un "herrero" (y gastar unos "cuartos"). De todas formas no creo yo que quedara tampoco mal con un cristalito.
Y hoy acabo con una curiosidad sobre las "re-famosas" mesas-bobina... ¡hasta han aparecido en algún que otro cómic!
